La rentabilidad del equipamiento de protección exterior
Equipamiento

Personalizar la oferta es clave en los espacios outdoor

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Para un negocio de hostelería, disponer de un espacio outdoor es contar con un elevado potencial de desarrollo. Tomar la decisión de valorizarlo supone, por un lado, ampliar el margen de rentabilidad del negocio (siempre necesario), pero también dar continuidad al espacio interior, a la propia imagen y a personalizar el establecimiento frente a la competencia a través de la diferenciación. El equipamiento de protección frente al sol, la lluvia y el viento -pérgolas, parasoles y toldos-, además de complementar al resto del mobiliario exterior, resulta imprescindible para ampliar el periodo de uso de los espacios exteriores, proyectar la imagen de nuestro negocio y mejorar la experiencia del cliente. En últimos años, el diseño del equipamiento de exterior ha tenido una importante evolucióncon la creación de elementos que tienen como objetivo proyectar los espacios interiores hacia el exterior.

Los espacios outdoor se han convertido en uno de los requisitos más tenidos en cuenta por los clientes a la hora de la elección de un hotel, un restaurante o un lugar donde disfrutar de momentos especiales

Equipamientos que, más allá del propio diseño, buscan establecer espacios protegidos frente a una climatología adversa o demasiado benigna y crear ambientes diferenciados, bien sea en la terraza de un edificio ubicado en el centro de la ciudad, en una terraza al aire libre o en el jardín de un establecimiento de carácter rural. Espacios exteriores que cada vez valoran con mayor intensidad los clientes y huéspedes -al ser donde invierten buena parte del tiempo de su estancia- y que se han convertido en uno de los requisitos que más tienen en cuenta a la hora de la elección de un hotel, un restaurante o un lugar donde disfrutar de momentos relajantes con familia o amigos, charlando, tomando un refresco o leyendo.

Debido a ese uso cada vez más intensivo, estos espacios se han convertido en la imagen que proyecta hacia el exterior un negocio hostelero cobrando especial importancia su diseño –que se sitúa al mismo nivel que la decoración interior-, así como la elección de un equipamiento que se integre lo máximo posible en el estilo del establecimiento y que, en el caso de las pérgolas, toldos y parasoles, debe contar con unas características determinadas basadas en la calidad, la resistencia y la facilidad de mantenimiento.

Diferenciación y rentabilidad

Teniendo en cuenta que, como hemos dicho, los espacios exteriores de los establecimientos hosteleros están cobrando cada día mayor importancia en cuanto a la imagen que se traslada del negocio a los clientes, su diseño se convierte en uno de los factores diferenciales. En este sentido, desde el departamento técnico de Greendesign señalan la importancia de “cuidar al máximo todos los detalles. Siempre se tiene en cuenta que los espacios deben ser cómodos y funcionales, pero además se le da mucha importancia al diseño, es un factor que marcará la diferencia con respecto a otros locales. Un buen diseño, sencillo pero a la vez atractivo, sin duda llamará más la atención sobre los clientes y les hará elegir un local u otro de un simple vistazo. Desde nuestro punto de vista, estos espacios son comparables a los espacios interiores, aunque en muchas ocasiones se comete el tremendo error de dejar de lado la zona exterior y no cuidar de ella cuando es la que probablemente más nos gusta disfrutar”.

En opinión de Greendesign, con la instalación de pérgolas y el acondicionamiento de las zonas exteriores “se consigue una dilatación en el tiempo del uso de estos espacios exteriores, y con ello una mejora en la calidad de la estancia en el exterior, lo que ofrece como resultado una zona de confort para el cliente. La ampliación de la capacidad del local es un valor añadido directo, ya que al tener el espacio exterior acondicionado ante las inclemencias del tiempo, el incremento de clientela se verá aumentada, incidiendo directamente en los beneficios del establecimiento. Es una inversión que sin duda se verá amortizada en muy poco tiempo”.

En los últimos años, según el Director Comercial de la División Outdoor Solutions de IASO, “están cobrando mucha importancia los espacios exteriores dándoles un tratamiento de continuidad en todos los aspectos del espacio interior. Por esto, cada vez se está tratando y valorando más los proyectos de equipamientos exteriores. La tendencia es aprovechar el espacio exterior durante todo el año, porque el volumen de negocio que se genera en el exterior será cada año más importante”. Y esa importancia que están adquiriendo se debe, según Hidalgo, a que se trata de “espacios multifuncionales. Por ello, el cubrimiento de la zona outdoor permite al cliente poder estar más en contacto con el exterior y con una mayor visibilidad hacia el paisaje. Además las terrazas cubiertas dan más rentabilidad al negocio ya que pueden utilizarse los 365 días del año”.

Desde la empresa italiana Corradi, especializada en el equipamiento exterior y desde 2015 integrada en el grupo belga Renson, además de contemplar tanto el espacio exterior como el interior como “la imagen global del local” y considerar que el diseño “debe estar en línea con el nivel de clientes que el establcimiento aloja o potencialmente quiere alojar”, detallan que entre los valores que aporta una zona outdoor protegida están “la ampliación del área de trabajo y el horario y, por tanto, de la rentabilidad; el poder disfrutar del espacio al aire libre durante todo el año; la posibilidad de ampliar el espacio cuando sea necesario y de utilizarlo de diferentes formas; y dar un valor añadido a la imagen del establecimiento”.

En esta misma línea se posiciona Bart Derudder, Area Sales Manager Ibérica de Renson Outdoor, para quien la protección de esos espacios “permite la utilización de la terraza durante todo el año, rentabilizando mucho mejor el espacio. Realmente es una inversión para el hostelero que rentabilizará relativamente rápido. Desde Renson ofrecemos ocho tipos de pérgolas distintos –bien sea de lamas o sea textil-, con muchos accesorios y acabados posibles, lo que da la posibilidad de combinar la pérgola con cualquier estilo constructivo o cualquier ambiente exterior”.

Lo más demandado y lo que hay que tener en cuenta

Si nos basamos en la demanda, y aunque tanto pérgolas como parasoles y toldos, tal como afirma Bart Derudder, “pueden ser soluciones válidas y muchas veces se combinan, dependiendo de las necesidad de cada negocio”, a la hora de elegir los elementos para protección exterior hay preferencias por parte del sector hostelero. De acuerdo con su experiencia, desde Greendesign indican que “los sistemas más demandados por los clientes son sin duda las pérgolas bioclimáticas, ya que son las que mejor nos van a permitir protegernos de los agentes externos. Aúnan estética y funcionalidad, y, como ya comentábamos anteriormente, son sistemas que se amortizan rápidamente debido a la gran mejora que supone para la instalación del establecimiento”.

Para Corradi lo son las “pérgolas retráctiles por los valores añadidos que aportan. En situaciones climáticas delicadadas, los parasoles y los toldos no permiten la utilización del espacio. Sin embargo, con las pérgolas retráctiles el espacio es 100% aprovechable”. Se trata de un sistema, añaden desde la empresa italiana, que aporta “una solución a medida, la practicidad de abrir y cerrar las pérgolas de manera muy sencilla, así como el poder jugar con un espacio indoor/outdoor en cualquier momento”.

Por su parte, los productos que más solicitan los clientes de IASO son “parasoles y pérgolas. Pero lo que más instalamos –comenta Josep Hidalgo- son los parasoles, ya que las ordenanzas municipales no permiten instalar pérgolas en algunos municipios. Los aspectos que se valoran en ambos productos es que se pueden equipar totalmente con varios modelos de cerramientos o cortinas laterales, calefacción, audio, iluminación, tarima, mobiliario… Son productos multifuncionales que están muy bien valorados por nuestros clientes, ya que les permite sacar el mayor provecho durante todo el año a sus zonas de outdoor”.

Por lo que respecta a lo que hay que tener más presente a la hora de decidirse por dar valor a los espacios exteriores de los negocios de hostelería, el Director Comercial de la división Outdoor Solutions de IASO identifica como más importante “la calidad y la durabilidad. Además –añade-, tienen que poderse equipar y acondicionar para sacarles provecho todo el año. Cuantas más prestaciones ofrezcan los productos más cómodo y a gusto estará el cliente, más rentabilidad se le sacará al negocio”.

Estos espacios son los “encargados” de proyectar al exterior la imagen diferencial del establecimiento, lo que incrementa la importancia de su diseño y el cuidado máximo de todos sus detalles

Desde el departamento técnico de Greendesign argmentan que el factor más importante a tener en cuenta para estos espacios “es el plus de calidad con el que se le dota a este servicio, ya que amplían la oferta del mismo, con la funcionalidad de dichas instalaciones y una estética cuidada, garantizando una agradable estancia para los clientes. Y con todo ello, un aumento en la rentabilidad del establecimiento”.

Tanto desde Renson como desde Corradi inciden en la importancia de la calidad del producto y en que cuente con un buen servicio de un instalador oficial repaldado por la marca y con un servicio pos-venta cualificado. “La solución que se elige –remarca Bart Derudder- es un elemento muy visible y que aporta mucho al establecimiento. pero si se deteriora rápido puede convertirse en todo lo contrario”.

Diseños sencillos y de fácil mantenimiento

Las tendencias actuales en cuenta al diseño de los espacios exteriores apuntan, en opinión de Greendesign, “hacia la sobriedad en los espacios, la utilización de líneas puras… Diseños sencillos que encajen perfectamente en cualquier entorno y, sobre todo, que dejen protagonismo a la decoración o al espacio exterior en el que se encuentran. En cuanto a materiales, en Greendesign siempre ofrecemos la máxima calidad. Para nosotros lo más importante es que independientemente del tipo de instalación que se vaya a realizar, siempre cuente con los materiales adecuados y que mejor se comportan en cada situación”.

Desde Corradi enumeran tendencias como las “líneas rectas, diseños ‘limpios’, materiales con poco mantenimiento, trasladar las comodidades del interior al exterior, soluciones que puedan mejorar el estilo de vida y dar beneficios a nivel de medio ambiente”. Mientras que Josep Hidalgo de IASO añade también “los materiales con aislamiento acústico y térmico. Y en cuanto a los tejidos, que sean repelentes a la suciedad, fáciles de limpiar y resistentes a las inclemencias meteorológicas”.

Sobre este último punto, el de los tejidos, Víctor Saona, nuevo Director de Marketing de Recasens, considera que “la lona 100% acrílica tintada en masa, como la que fabricamos nosotros, es la más acertada si buscamos una lona transpirable y bien estructurada que permite que el aire circule y que tanto el calor como la humedad no queden atrapados. En el caso de las pérgolas, el tejido más demandado actualmente es el de PVC opaco, donde se busca una mayor protección solar creando un mayor confort visual y térmico”.

Entre las ventajas que aporta un espacio exterior bien equipado están la ampliación de la zona de negocio, el valor añadido que aporta a la imagen del establecimiento y, por tanto, la rentabilidad

Entre las últimas innovaciones que se han incorporado a los tejidos para el equipamiento de protección exterior, Saona señala “la lona igniífuga, los tejidos impermeables o los tejidos técnicos de screen de polyester de alta tenacidad en el caso de toldos y parasoles. En el de las pérgolas, los tejidos impermeables decorativos como Reacril Proof y Dry que hemos incorporado recientemente. La I+D+i de estos tejidos está centrada en conseguir una mayor ligereza en el peso, así como mejores propiedades térmicas, obteniendo un confort mayor”.

Además de las ventajas que para los usuarios tiene la evolución de los tejidos técnicos, que incluso incorporan tecnología basada en nanopartículas que repelen el agua o el aceite, existe también otras tendencias que se encaminan hacia la utilización de materiales naturales como la madera, la cuerda, la paja, el junco o el brezo que aporten a nuestro espacio exterior un toque natural y fresco. Es el caso de la empresa sevillana Tejados Rústicos Vegetales, especializada en la construcción de cubiertas vegetales con acabado en Junco Africano.

Un material empleado durante siglos para techar casas y residencias y que hoy también se utiliza para techar desde sombrillas a cubiertas de establecimientos como chiringuitos, restaurantes y hoteles. Según la propia empresa, gracias a sus propiedades aislantes este material “es capaz de mantener el interior cálido en invierno y muy fresco en verano, consiguiendo diferencias de temperatura de 5 a 10º respecto el exterior”. Al ser productos naturales, también se pueden solicitar “con tratamiento ignífugo retardante, que además aumenta su durabilidad. Las maderas utilizadas están tratadas con autoclave, proporcionando garantías fitosanitarias y de durabilidad”. Características a las que Tejados Rústicos Vegetales añade “un servicio de instalación con un equipo cuyos componentes proceden de Sudáfrica -formados de manera tradicional en su país-, capaz de completar cualquier tipo de instalación con las máximas garantías y en breve plazo de tiempo”.

Puede leer el informe de mercado completo en el nº 67 de Revista HOSTELERÍA.

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