Revista
Casa Lolea aterriza en Madrid con su propuesta gastronómica. Pequeñas raciones, tapas, tablas, platos para compartir, todo acompañado de su sangría. El barrio de Chueca (Libertad, 26) acoge esta segunda Casa Lolea, diferente a la de Barcelona, con su propia identidad, pero conjugando el mismo concepto.
Grandes clásicos como las bravas, la ensaladilla rusa, la tortilla de patatas o el pan con tomate están presentes en su carta; conservas selectas, embutidos y montaditos, completan su amplia oferta. Sabores de toda la vida con toques contemporáneos para compartir y combinar con cualquiera de las cinco variedades de sangría gourmet –Lolea Nº1, Lolea Nº2, Lolea Brut, Lolea Organic y Lolea Rosé–.
El espacio cuenta con tres ambientes. El primero, con mesas altas y vistas a la barra. El segundo, más amplio, es un comedor, para comidas más formales. Y, por último, un pequeño comedor privado con capacidad para diez personas.
Los elementos decorativos completan el entorno. Vajillas esmaltadas, azulejo blanco, servilleteros de lunares y delantales de cuadros conviven con las llamativas botellas de sangría.