Tras la imposibilidad actual de viajar y el cierre total o parcial de las fronteras por parte de distintos países, muchos destinos nacionales están viendo casi por perdida la campaña de verano, especialmente aquellos donde el turismo internacional es fundamental para la economía local.

Ante esta situación, la web de viajes Holidayguru.es ha tomado los datos de la última encuesta anual de ocupación hotelera publicada por el INE y ha recopilado a aquellos destinos españoles que reciben a más viajeros internacionales, los cuales se verán obligados a confiar en el turismo nacional en el corto-medio plazo.

Uno de esos destinos es Granada, que cerró 2019 con un 40% de visitantes extranjeros según el área de turismo. Otra de las ciudades españolas que vive en gran parte del turismo internacional es Benidorm, que recibe gran cantidad de visitantes procedentes de Alemania y Gran Bretaña que este año dejarán de viajar. Por ello, la patronal de Benidorm ha previsto poner en marcha iniciativas para que se reactive el programa de Imserso con 100.000 paquetes, y reactivar así de algún modo el turismo nacional.

El turismo de las Islas Baleares será el que más sufra la crisis del COVID-19, en contraste con Madrid que, al no ser un destino vacacional de temporada, lidiará mejor con la situación

Por otro lado, las playas de Adeje, al sur de Tenerife, se ha ido convirtiendo con el tiempo en uno de los destinos vacacionales más relevantes de Europa con una amplia oferta de hoteles de cuatro y cinco estrellas, de hecho, el pasado año el turismo peninsular llegó a suponer solo un 18% del total. Mientras tanto, otros muchos turistas visitan a menudo San Bartolomé de Tirajana, en Gran Canaria, una localidad que tiene censados a más de 12.000 extranjeros.

Otro de los destinos recopilados por Holidayguru.es es Calviá, en las Islas Baleares, uno de los lugares de España más visitados por los extranjeros, especialmente alemanes, en parte por el 21% de los alojamientos de toda la isla se encuentran en esta localidad. Mientras tanto, la cancelación de la Semana Santa o la Feria de Abril han afectado de forma directa a una de las principales ciudades españolas a lo que visitantes extranjeros se refiere, como es Sevilla. De hecho, su ayuntamiento ya ha impulsado un plan de cara a otoño de 2021 para reformular el turismo de la ciudad.

Sin embargo, el turismo de Palma de Mallorca, y de todas las Islas Baleares en general, será el que más sufra por la crisis del COVID-19 de entre todas las comunidades. Esto contrasta con el caso de Madrid que, al no ser un destino vacacional de temporada, sino que acoge a viajeros durante todo el año, ayudará a la ciudad a lidiar mejor con la situación. Además, la presidenta de la Comunidad de Madrid ya pidió una campaña de turismo nacional para el verano, con el fin de que las pérdidas supongan el menor daño posible.

Por último, destaca Barcelona, que en 2019 registró la proporción de viajeros nacionales frente a viajeros extranjeros más baja hasta la fecha, un 15% concretamente. Por ello, a principios de año la ciudad condal inició un llamamiento para incentivar este tipo de turismo de proximidad y no depender tanto de los visitantes internacionales que, ante la situación actual, ven pospuestos sus planes de viajar a Barcelona, que se verá obligada a diversificar su oferta de cara al futuro.