En los últimos días, cinco cocinas solidarias se han unido en España a World Central Kitchen, la ONG del chef español José Andrés, para ayudar a combatir la crisis actual del coronavirus.

“Estamos muy contentos de ver como este movimiento gastronómico solidario va creciendo y en tan sólo una semana hemos pasado de una cocina a más de cinco. Ya estamos analizando la situación y las necesidades en los diferentes territorios geográficos españoles para comenzar a trabajar en los lugares donde más urge la ayuda. En Madrid, hemos recibido una respuesta tan positiva que, por ahora, tenemos cubiertas las necesidades para las próximas semanas. Agradecemos enormemente la colaboración y predisposición de todas las personas que se suman al proyecto y seguimos recibiendo voluntarios que quieran apoyar esta iniciativa solidaria para sumarse a los diferentes equipos de trabajo que ya están abiertos”, ha asegurado Javier García, Secretario General de World Central Kitchen.

Las nuevas cocinas que se unen a la iniciativa son Dstage y Medems Catering, con el chef Diego Guerrero, la chef Pepa Muñoz del restaurante el Qüenco de Pepa, que operará al frente de la cocina de NH Collection Madrid Eurobuilding elaborando menús solidarios, y Bulbiza en Madrid; Fierro en Valencia y el chef Carles Tejedor en Barcelona.

"Ya estamos analizando la situación y las necesidades en los diferentes territorios geográficos españoles para comenzar a trabajar en los lugares donde más urge la ayuda"

De esta forma, Barcelona y Valencia se suman a las ciudades en las que World Central Kitchen está focalizando esfuerzos a través de #ChefsForSpain. Un movimiento gastronómico social con el que se pretende ayudar a las personas más vulnerables durante la crisis sanitaria.

Mientras tanto, los esfuerzos de la ciudad de Madrid estarán representados por Dstage y Medems Catering, con el chef Diego Guerrero, la chef Pepa Muñoz del restaurante el Qüenco de Pepa y también, a través de los restaurantes y chefs del grupo Bulbiza, que están trabajando ya en una cocina cedida por el Ayuntamiento de Madrid en Santa Eugenia. En ella ya trabajan los chefs Juanjo López, de La Tasquita de Enfrente y La Retasca; Carlos del Portillo, de Bistronómika; Iñaki Gorrotxategi, de Casa Julián de Tolosa, y Ricardo Vélezde The Patissier.

En Barcelona, por su parte, el chef Carles Tejedor, desde su cocina ubicada en Terrasa, está contribuyendo a realizar miles de raciones distribuidas diariamente a familias en riesgo de exclusión social y migrantes. A su vez, en Valencia, el restaurante Fierro, con los chefs Germán Carrizo y Carito Lourenço al frente, se ha marcado el objetivo de conseguir superar las 1.000 comidas diarias destinadas a familias en situación desfavorecida y personas mayores que no puedan salir de casa. Para ello, cuenta con el apoyo del Banco de Alimentos de Valencia y de otros colaboradores locales, como Jesús Machí, quien elaborará de forma diaria el plan para todos los menús.

Los platos elaborados en todas las ciudades buscan ser saludables, menús adaptados para poder cubrir las necesidades de mayores, niños, así como distintos requerimientos nutricionales y religiosos. Además, todos los ingredientes para elaborar los platos han sido donados por Makro y, para asegurar que los menús se distribuyen a las personas que más están sufriendo la crisis, seguirán trabajando con Banco de Alimentos y distintas organizaciones y entidades benéficas.

Hay que destacar que, World Central Kitchen ha dado respuesta ante la amenaza del COVID-19 en más de 20 ciudades del mundo. Japón fue uno de los primeros escenarios en los que ayudó cuando miles de personas se quedaron atrapadas en el crucero Diamond Press; experiencia que les sirvió para saber cómo producir y distribuir comidas a los más necesitados en un entorno seguro y eficiente. Ahora, ha dado el salto a España y cuenta, también, con la ayuda a nivel coordinación de Mateo&Co, consultora estratégica especializada en gastronomía.

Esta iniciativa se ha sumado así a todas las que el chef José Andrés a través de su ONG World Central Kitchen está llevando a cabo en Estado Unidos para combatir la crisis del coronavirus y asegurar un plato de comida a todas las personas más vulnerables y necesitadas en esta situación de emergencia sanitaria global.