Maison Carne, situado en el corazón del Eixample de Barcelona, concretamente en la calle Mallorca 204, ofrece una experiencia gastronómica basada únicamente en el chuletón de un kilogramo de calidad, proveniente de vaca Frisona alimentada durante 12 meses con pura hierba, y cocinado al horno Josper.

El concepto de Maison Carne se basa en la relación calidad, precio y placer, sirviendo un chuletón de un kilogramo para una o dos personas a compartir por un precio de 29 euros, incluyendo un cono de patatas fritas caseras y ensalada de la casa. El chuletón se cocina con el horno Josper para que, posteriormente, el comensal pueda terminarlo a su gusto en la propia mesa.

Este concepto, que evoca a las charcuterías tradicionales, permite al visitante comprar su pieza de carne y llevárselo crudo por 20 euros el kilogramo, siguiendo el formato take away. Además, la marca planea incorporar próximamente el servicio a domicilio a través de delivery con Uber eats y Glovo.

Maison Carne se caracteriza por la originalidad de conservar el trabajo de las antiguas carnicerías transportadas al estilo de un restaurante, en el que las mesas de madera recuerdan a las propias de este tipo de establecimientos, así como los vasos cortados de botellas de cristal, cuchillos especializados en el corte de carne, e incluso, el estilo de la luz y las paredes que tratan de evocar dichos locales.

Además del chuletón de un kilogramo, Maison Carne, ofrece de manera gratuita en el aperitivo el tradicional Paté de Cabanes, producido artesanalmente en Douzens, cerca de Carcassone. También pone a disposición de los comensales una tabla de quesos con diferentes opciones de sabores y variedades a degustar, así como una carta de vinos entre el que se encuentra la especialidad de la casa, producido artesanalmente por la cave Coopérative d'Embres et Castelmaure con Denominación de Origen AOC.