El concejal de Turismo del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pedro Quevedo, y la directora de expansión de Barceló Hotels para Canarias y Cabo Verde, Pilar Parejo, formalizaron el pasado 6 de noviembre el contrato de arrendamiento del Hotel Santa Catalina, propiedad municipal, para los próximos 35 años. El hotel Santa Catalina inicia de esta manera una nueva etapa como Santa Catalina, a Royal Hideaway Hotel, convirtiéndose así en el segundo establecimiento de la marca de lujo Royal Hideaway en las Islas Canarias.

El grupo Barceló obtuvo la mejor puntuación en el concurso público de arrendamiento convocado el pasado 16 de junio al que optaron cinco licitadores. El contrato del actual adjudicatario finaliza el 11 de noviembre. A partir de esta fecha, el grupo Barceló asumirá la gestión del hotel que permanecerá abierto hasta marzo de 2018.

La propuesta de Barceló prevé una inversión inicial de 24,5 millones de euros para la reforma

La propuesta de Barceló prevé una inversión inicial de 24,5 millones de euros para la reforma y una renta anual a la ciudad de 600.000 euros. La intervención que se propone en el Hotel Santa Catalina tiene como fin principal mantener su carácter emblemático, permitiendo modernizar las instalaciones y, al tiempo, recuperar y conservar el patrimonio histórico del hotel y la apariencia icónica de la fachada.

El establecimiento permanecerá abierto hasta la primavera de 2018 y, una vez que comience la reforma, el hotel podría estar cerrado en torno a los 9 meses. Por el alto grado de protección del hotel cualquier intervención ha de ser estudiada, valorada y supervisada por la Comisión del Patrimonio Histórico de Gran Canaria.

El proyecto de Barceló

El director regional de Barceló Hotels & Resorts en Canarias, Ángel Esquinas, ha explicado que “en las nuevas 194 habitaciones ofertadas, se revisará todo el mobiliario catalogado para determinar la originalidad de las piezas diseñadas por el arquitecto Miguel Martín, integrando su restauración con la implementación de los estándares de la Royal Room de Royal Hideaway”.

Otra de las premisas principales del proyecto es la creación de un eje verde que integre al Santa Catalina con su entorno. Para ello, el edificio conectará con el Parque Doramas a través de un atrio y de un sistema de patios interiores que se recuperarán del proyecto inicial del hotel. Junto a la creación de este eje, se implementará un proyecto en los accesos al hotel para mejorar la accesibilidad.

El responsable en Canarias de Barceló, que estuvo acompañado por el subdirector general de construcciones del grupo, Damian Socías, añadió que los espacios del hotel destinados a restauración también serán objeto de una ambiciosa reforma que diversificará la oferta gastronómica.