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El Park Piolets MountainHotel & Spa de cinco estrellas, situado en el corazón de los Pirineos andorranos, tiene nuevo diseño interior firmado por la interiorista Pilar Líbano, partiendo de una selección de materiales nobles como madera, piedra, piel y hierro. Su diseño combina funcionalidad y estética, con una clara intención de integrarse en el entorno natural.
Las habitaciones, pensadas para distintos tipos de viajeros, desde parejas hasta familias, mantienen una coherencia visual basada en tonos cálidos y texturas naturales. Las terrazas privadas permiten disfrutar del paisaje pirenaico, sumando valor a la experiencia.
Esta temporada, el hotel ha reforzado su oferta con la incorporación de nuevos espacios ya operativos que amplían sus servicios tanto para familias como para viajeros de negocios
Esta temporada, el hotel ha reforzado su oferta con la incorporación de nuevos espacios ya operativos que amplían sus servicios tanto para familias como para viajeros de negocios. Las principales novedades son el restaurante Don Giovanni, con una propuesta de cocina italiana en un entorno renovado, un nuevo Kid’s Club pensado para los más pequeños, y un área de salas MICE.
En las zonas comunes se mantiene esta línea de diseño. El Park Spa Mountain Wellness Club se apoya en luz natural, distribución abierta y materiales orgánicos para generar un ambiente propicio al descanso. Los circuitos de agua, cabinas de tratamiento y espacios de relajación están organizados de forma que facilitan una desconexión efectiva.
La propuesta gastronómica también incorpora una mirada de diseño diferenciada. El restaurante KAO Soldeu, especializado en cocina china, presenta un interior inspirado en Asia oriental, con acabados en piedra, madera y tejidos que acompañan la experiencia culinaria. Por otro lado, el Lounge Bar y la Moët & Chandon Terrace proponen un ambiente más sobrio, con predominio de la pizarra y la madera, manteniendo el vínculo visual con la arquitectura general del hotel y su paisaje circundante.
Los espacios exteriores han sido diseñados por el estudio Aeland de Ana Esteve, con un enfoque paisajístico que refuerza la conexión con el entorno. Se ha sustituido parte del antiguo aparcamiento por un jardín de alta montaña, y se han acondicionado zonas como la terraza chill-out y el entorno del restaurante para uso durante todo el año.
La ubicación del hotel favorece tanto el turismo de invierno como las actividades de montaña en temporada estival. Desde rutas en bicicleta hasta excursiones a pie, el entorno ofrece posibilidades variadas que complementan la experiencia del alojamiento.